«¿Existe efecto yoyó con el Método Pose?»Es una pregunta habitual, que nos realizan los pacientes que optan por esta técnica de reducción de estómago.
Pero, antes de desvelar esta incógnita, te explicamos en que consiste esta cirugía mínimamente invasiva. El Método Pose es un proceso en el que se reduce la capacidad del estómago del paciente en un 25%. Por vía oral y a través de una endoscopia, el médico realiza unos pligues es unos puntos estratégicos del estómago del paciente. Con esta reducción se logra que el paciente se sacie antes e ingiera menos alimentos. Aunque coma menos, los pliegues que se hacen en la base del estómago favorecen que el vaciado sea mucho más lento.
Esta técnica bariátrica está orientada a pacientes que llevan años con problemas de obesidad. Personas con un IMC (índice de masa corporal) de entre 25 y 40. Cuando un paciente decide apostar este método, previamente ha realizado muchas dietas, con los que perdía peso, pero con el tiempo volvía a engordar con el tiempo (efecto rebote).
Pero, con el Método Pose, nuestros pacientes mantienen el resultado gracias a la reeducación alimentaria.
¿CÓMO EVITA LA REEDUCACIÓN ALIMENTARIA EL EFECTO YOYÓ CON EL MÉTODO POSE?
Con el método Pose, el paciente consigue una pérdida gradual de peso. Durante los 3 primeros meses, de media se pierden entre 600 gramos y un 1’5 kg. Pero, si el paciente realiza un programa de reeducación alimentaria. De ese modo se garantiza que el cambio sea definitivo, pues nuestro equipo le enseña las herramientas para que su vida sea más sana.
En Minerva, nuestra unidad de nutrición y obesidad, se realiza un programa de seguimiento después de la intervención. Nuestro equipo multidisciplinario formado por psicólogos, nutrcionistas, médicos y coach, que guían al paciente durante 2 años.
El Primer Año
- Control evolutivo semanal con el médico en la clínica
- Seguimiento psicológico mensual
El Segundo Año
- Control evolutivo semanal con el médico en la clínica
- Seguimiento psicológico bimensual
El Método Pose no es una píldora mágica, es una herramienta para modificar y corregir los malos hábitos alimentarios. El grado de implicación en el programa es vital para lograr que el éxito se prolongue en el tiempo.
