Antonio Fustes, médico estético de Clínicas Dorsia, nos cuenta todo sobre la celulitis cómo prevenirla y cómo actuar. ¡Te lo contamos!
Celulitis, ¿qué es?
La celulitis es un padecimiento o condición del tejido celular subcutáneo, es decir de la grasa que tenemos entre la piel y los músculos. Su encuentra casi exclusivamente en los glúteos y los muslos, especialmente en su cara posterior. Se caracteriza por la presencia de hoyuelos de diferentes profundidades. Las lesiones suelen ser las mismas a lo largo de la vida, aunque algunas puedan aparecer o agravarse con el tiempo. No se relacionan con el peso de la paciente, aunque pueden empeorar con los cambios de peso. La flacidez cutánea siempre hace que sea más evidente.
Celulitis, ¿cómo aparece?
Se origina por un trastorno de los vasos sanguíneos de la grasa que van induciendo a los cambios que llevan al endurecimiento de la grasa (celulitis dura y en ocasiones dolorosa, que debe diferenciarse del lipedema) o bien alterando el drenaje linfático dando origen a la celulitis edematosa o blanda. Estas alteraciones vasculares terminan provocando la formación de los tabiques fibróticos que son los responsables de la umbilicación de la piel y la presencia de hoyuelos o nódulos grasos, dando el aspecto de piel de naranja o requesón.
Se confunde frecuentemente con los hoyuelos que pueden asociarse a la flacidez o es común que las personas se refieran a las adiposidades localizadas (como en abdomen, michelines o cartucheras) como celulitis. La verdadera celulitis se refiere exclusivamente a los hoyuelos específicos de la condición.
Celulitis, ¿se puede prevenir ¿cómo?
Cómo ya hemos comentado la celulitis tiene una relación importante con las hormonas femeninas normales, por lo cual es complicado poder evitarla por completo, pero algunas cosas ayudan a que no se agrave. Se considera que el consumo de azúcares refinados o bebidas carbonatadas podrían empeorarla, aunque no hay nada demostrado a este respecto, es una recomendación que se puede seguir. El vestir con ropas demasiado ajustadas también se ha asociado con empeoramiento de la celulitis. En contrapartida el uso de medias compresivas con niveles de compresión de entre 10 y 20 mm de Hg, pueden mejorar la circulación y ayudar en el flujo sanguíneo de la grasa. Por último, ejercitarse adecuadamente para ganar masa muscular en especial de la zona glútea y de los muslos ayuda a que la piel sea más firme al tener un contenido más tonificado.
Celulitis, ¿cómo podemos tratarla?
Existen algunos tratamientos de cabina que pueden ayudar con la celulitis algunas máquinas como la radiofrecuencia, LPG y algunos láseres ofrecen tratamientos alternativos que ayudan a dar un mejor aspecto a la piel. La carboxiterapia que consiste en inyectar dióxido de carbono que la sangre cambia por oxígeno, mejora la oxigenación de la zona afectada mejorando su circulación y metabolismo. Mesoterapia con algunas sustancias como la cafeína o Alydia (intralipoterapia) también dan algún grado de ayuda. Igualmente, masajes anticelulíticos en manos experimentadas pueden mejorar la apariencia de la piel afectada.
A la fecha solo existe un tratamiento que puede llevar a la resolución de la celulitis y es Cellfina. Este tratamiento consiste en cortar los tabiques fibrosos que tiran de la piel y forman el hoyuelo. Es un tratamiento bastante novedoso con resultados en general bastante buenos.
Celulitis, ¿cómo podemos mantener los resultados?
Seguir las recomendaciones que hemos mencionado como consumir menos azúcares refinados, bebidas carbonatadas, usar medias compresivas adecuadas, no llevar ropa apretada que dificulta la circulación correcta en la grasa. Además de mantener el peso y hacer ejercicio regularmente con intención de mejorar el tono muscular y la circulación son medidas que ayudan al mejoramiento del aspecto y al mantenimiento de los resultados alcanzados.
Pero, como hemos comentado el tratamiento con mayor efectividad, es la subcisión (de momento el único aparato que permite realizar este procedimiento es el Cellfina) que permite hacer las rupturas de los tabiques alisando importantemente la piel afectada. No todas las pacientes son candidatas para este tratamiento, pues flacidez y estrías pueden contraindicarlo, al igual que el sobrepeso o la edad mayor de 58 años.
El resto de los tratamientos son ayudas alternativas que cuando la paciente está en disposición de adoptar hábitos correctos de alimentación y ejercicio pueden ser útiles, pero no desaparecen la celulitis.