Lipedema

Según los últimos estudios médicos y clínicos, se estima que solo en España entre 960.000 y 2,64 millones de mujeres podrían estar afectadas de la enfermedad de lipedema. Una patología reconocida desde el 2018 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) dentro de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11).

Pero entonces, ¿qué es el lipedema? Cuando hablamos de lipedema nos referimos en concreto a una enfermedad inflamatoria del tejido graso que da lugar a una acumulación de grasa desproporcionada, dolorosa y con una distribución anómala en zonas específicas del cuerpo. En concreto, afecta a las extremidades superiores e inferiores.

Esta patología que afecta ya alrededor de un 10-15% de las mujeres a nivel mundial es de carácter genético, lo que da lugar a que varios miembros femeninos de la familia pueden sufrir esta enfermedad en silencio.

Al igual que la gran mayoría de las enfermedades, el lipedema se puede clasificar en grados según el grosor del tejido graso y en tipos/estadios en función de la gravedad y las zonas afectadas en el cuerpo.

Según el grosor del tejido graso:

• Grado 1: la superficie de la piel sigue siendo lisa, comienza a aparecer tejido graso subcutáneo grueso con nudos finos.
• Grado 2: los nudos empiezan a crecer y verse más gruesos. Aparecen los primeros bultos y abolladuras.
• Grado 3: tanto el tejido como la piel es dura y gruesa. Hay mayores irregularidades en la piel y los bultos de grasa son muy evidentes.

Según las zonas afectadas:

• Tipo 1: la grasa se acumula en zonas muy concretas como las nalgas y las caderas, lo que todo conocemos bajo el término “cartucheras”.
• Tipo 2: el lipedema ha comenzado a expandirse hacia las rodillas, donde se forman ya cúmulos de grasa visibles.
• Tipo 3: la acumulación de grasa sigue descendiendo por las extremidades inferiores hasta llegar a los tobillos.
• Tipo 4: se extiende a las extremidades superiores, todo el cuerpo se encuentra afectado por la enfermedad. A excepción de pies y manos.
• Tipo 5: afecta únicamente de rodilla a tobillo. Es el tipo menos común entre las mujeres.

Causas del lipedema  

• Evidencia científica que la enfermedad inflamatoria del lipedema tiene una alta predisposición genética y hormonal. En torno al 15-64% de las pacientes de lipedema tienen antecedentes familiares con esta patología.
• Los primeros síntomas suelen ser visibles durante la etapa de la pubertad, agravándose más tras el embarazo y la menopausia.
• Más del 50% de las mujeres con obesidad sufren a la vez lipedema.
• Afecta de forma prácticamente exclusiva a la población femenina.

Síntomas del lipedema  

• Anomalías en la distribución del tejido graso de forma desproporcionada en las extremidades inferiores y, en ocasiones, las superiores.
• Las pacientes no reaccionan de forma adecuada a los programas y tratamientos específicos de pérdida de peso. Hay que tener en cuenta que el lipedema no es un problema de obesidad, es una enfermedad inflamatoria del líquido graso.
• Aumento del volumen de las extremidades de una forma simétrica.
• Sensación constante de pesadez, hormigueo y presión en estas partes del cuerpo.
• Dolor repentino y espontáneo al contacto.
• Piel más gruesa de lo habitual. Similar al aspecto de la celulitis.

En la gran mayoría de las ocasiones, el lipedema suele sufrirse en silencio y se tiende a realizar un mal diagnóstico de esta enfermedad. No se debe confundir con otro tipo de enfermedades, entre ellas la linfedema, los edemas secundarios o la obesidad. Para evitar que sea tratado de una forma incorrecta y errónea para el paciente, se recomienda acudir a clínicas especialistas en lipedema con un equipo de médicos y cirujanos profesionales formados en esta enfermedad como Dorsia. En nuestras clínicas, el equipo médico realizará pruebas y exámenes clínicas para poder diagnosticar correctamente la enfermedad y poder tratarla con el tratamiento que es debido.

¿Crees qué podrías tener lipedema? Si es así, no esperes más y solicita una cita de diagnóstico de lipedema en cualquiera de nuestros centros médicos especializados en esta patología inflamatoria.

En Dorsia ponemos a tu disposición los mejores tratamientos, técnicas y tecnología médica para poner freno y combatir el lipedema de una forma efectiva y eficaz. Por medio de nuestro tratamiento conservador sin necesidad de intervención quirúrgica o a través de nuestra cirugía de liposucción con técnica PAL (Power Assited Liposuction) El innovador y avanzado método con el que nuestros cirujanos conseguirán moldear el contorno corporal de forma más precisa y segura sin dañar los tejidos, y reduciendo así los tiempos de recuperación y postoperatorio del paciente.

Tratamiento conservador para el lipedema

El tratamiento conservador para el lipedema de Clínicas Dorsia consiste en un programa específico de nutrición, fisioterapia, aparatología y psicología. En concreto, sesiones de drenaje linfático con el equipo de profesionales fisioterapéuticos y sesiones combinadas de presoterapia y radiofrecuencia.

La duración del tratamiento es de unos 6 meses aproximadamente.

Este programa conservador para tratar el lipedema está desarrollado para pacientes en un grado inicial de la enfermedad. Tras un previo diagnóstico por parte del equipo médico, nuestros profesionales indicarán si la paciente es apta o no para este tratamiento. Un paso previo a la cirugía con el que se puede frenar y combatir el lipedema.

Tratamiento quirúrgico: liposucción con técnica PAL

En el caso de que el tratamiento conservador no sea la opción óptima para ti, las asesoras médicas especializadas en lipedema ofrecerán el tratamiento quirúrgico de liposucción con técnica PAL para poner fin a esta enfermedad.

La liposucción con técnica PAL permite extraer y aspirar la grasa corporal de una manera más suave y selectiva. Gracias a la técnica PAL, el equipo de cirujanos especializados en Lipedema son capaces de retirar el tejido adiposo apelmazado en las piernas y/o brazos. La cánula especial con la que se realiza dicha intervención está diseñada con un sistema que emite vibraciones de una forma corta y muy rápida, lo que permite desprender y extraer con mayor facilidad esa grasa acumulada tan característica del lipedema.

La principal ventaja de tratar el lipedema con liposucción con técnica PAL es la facilidad del procedimiento para el cirujano, así como la rapidez de la intervención, la disminución del tiempo de recuperación y mayor retracción de los tejidos.

Este procedimiento se realiza en WM Hospitals mediante anestesia general con sedación. Aunque las incisiones son prácticamente mínimas, es normal que los pacientes presenten ciertas molestias, hematomas o inflamación en la zona tratada. No hay que preocuparse, ya que irán desapareciendo entre la primera y segunda semana tras la intervención.